Qué ver en Petra en un día.
Los mejores lugares que ver en Petra, Jordania.
Llega el día esperado por cualquier persona que viaja a Jordania, la visita de la ciudad nabatea de Petra. El área defendida por una cadena de altas paredes rocosas interrumpidas únicamente por el estrecho pasillo que han escavado las aguas del Wadi Musa, ofreció un refugio seguro a numerosas poblaciones de la antigüedad ya a partir del periodo neolítico, y que ha protegido los bellos lugares que ver en Petra hasta nuestro días.
– Breve historia de Petra.
Originariamente nómadas, los nabateos iniciaron una vida sedentaria en el área de Petra en torno al siglo VI a.C, pero fue solamente en los últimos tiempos de la época helenística y bajo la dominación romana que su capital adquirió la importancia y la riqueza que todavía hoy testimonian sus documentos.
Esta riqueza nacía probablemente de una hábil política que aprovechaba la posición geográfica de la ciudad, emplazada en una encrucijada estratégica de la ruta comercial que conectaba la península arábiga con el área sirio-anatolia y con Egipto.
Este emplazamiento privilegiado permitía la imposición de un peaje y el suministro de alojamiento, agua y víveres a las caravanas de paso.
En el siglo VI un violento terremoto destruyó numerosos edificios de la época romana ( ya no estaban escavados en la roca sino construidos en elevación), y fue tal vez la causa del abandono de la ciudad. Algunas fortificaciones, que probablemente ya existían en el área fueron modificadas y reutilizadas en la época de la Cruzadas.
Hoy en día Petra está considerada como una de las 7 maravillas del Mundo Moderno.
– Nuestra visita de los lugares que ver en Petra en un día.
Antes de llegar al Siq (el desfiladero), penetramos en un área caracterizada a ambos lados por formaciones rocosas redondeadas de color blanco. Los primeros monumentos a los que se llega son tres torres cuadrangulares excavadas en la roca y conocidas como los Yinn ( los espíritus).
Se trata de tres tumbas construidas probablemente en el siglo I a.C, una de las cuales conserva en la parte superior los restos de una pirámide escalonada.
Un poco más hacia el valle, junto al margen izquierdo, se encuentra la Tumba de los Obeliscos. Es un primer ejemplo de las imponentes construcciones excavadas en la roca que caracterizan Petra. De la pared rocosa emerge sólo la fachada, decorada con elementos de derivación oriental, sobre todo egipcia. La tumba estestá dividida en dos partes: la superior ( que es la verdadera tumba de los Obeliscos) presenta cuatro obeliscos piramidales, elementos típicos de las tumbas nabateas. La parte inferior construida algunos decenios más tarde y conocida también como Tumba del Triclinio por los asientos que se encuentran en tres lados de la habitación central.
A unos 300 metros al sur de la Tumba de los Obeliscos se encuentra la Bab as-Siq, o sea la entrada del Siq propiamente dicho.
El Siq es una estrecha garganta formada por impresionantes paredes de arenisca de color rosado, amarillento y gris azulado. Originado por un cataclismo que provocó una hendidura en la montaña.
Mientras vamos caminando por el Siq vemos varios muros de contención. Fueron creados hace años para evitar los torrentes que se producen cuando llueve por esta zona, y que provocó la muerte de varias personas que se vieron sorprendidas. uneasy
Resguardados por la sombra y las agradables temperaturas que hay a estas horas, seguimos disfrutando de los numerosos detalles que hay en el camino.
Y antes de que nos demos cuenta, llegamos al plato fuerte de la visita. Al final del Siq vamos descubriendo poco a poco la fachada del Tesoro.
El Tesoro es la imagen más icónica que ver en Petra. La fachada excavada en la pared rocosa que se levanta frente a la salida del Siq, impresiona por sus proporciones ( unos 40 metros de altura por los 28 de metros de ancho), por el excepcional estado de conservación de la piedra, mejor protegida que en otros puntos de la erosión de los vientos, por la armoniosa composición arquitectónica de derivación helenística, así como por el cálido color rosado que ha tomado en la parte excavada, que se contrapone a las tonalidades más pardas de la superficie rocosa dejada intacta.
La función efectiva (¿era una tumba, un templo o un mausoleo real?) de este monumento sigue siendo objeto de discusión, así como la época de construcción: hay quien sostiene que surgió bajo el reinado de Aretas III (84-56 a.C), y quien lo atribuye al gobierno del emperador Adriano (117-138 d.C).
Si miramos hacia el lado contrario veremos “la pequeña” hendidura en la roca por la que hemos accedido a la ciudad nabatea de Petra.
A la derecha del Tesoro, la garganta se ensancha progresivamente formando un anfiteatro natural.
En él se puede ver, a la derecha, el llamado Sepulcro de las 17 tumbas, un monumento profundamente excavado en la roca que presenta en su interior 14 tumbas en el pavimento y otras tres en la pared posterior de la sala interna.
Hay también numerosas tumbas de estilo asirio, en varios niveles. Esta particular disposición ha determinado el nombre de “Calle de las Fachadas“, aplicado a este tramo del Siq Exterior.
Excavado totalmente en la roca en el siglo I de nuestra era y formado por 33 hileras de gradas con capacidad para 3000 espectadores, el Teatro es uno de los monumentos más impresionantes que ver en Petra.
En la pared rocosa que se levanta al nordeste del Teatro se puede ver una serie de espléndidas tumbas reales, construidas entre los siglos I y II d.C. La Tumba de la Urna, realizada probablemente para el rey Malichos II en torno al año 70. Impresiona por la altura y profundidad de la excavación.
Delante de la Tumba de la Urna se abre una explanada flanqueada por una columnata: ésta apoyada sobre una rampa con arcadas de mampostería-parcialmente restauradas, que a la vez le sirve de acceso.
La sala principal del interior, de enormes dimensiones, fue transformada en iglesia a mediados del siglo V.
Seguimos adelante y encontramos la sugestiva Tumba Corintia: la organización general de su fachada es muy similar a la del Tesoro, pero la estructura no está tan bien conservada como aquella.
El edificio situado inmediatamente al lado izquierdo del anterior, es conocido como la Tumba Palacio. Su fachada posee tres pisos y es uno de los monumentos más grandiosos que ver en Petra. Los dos niveles inferiores están excavados en la pared rocosa: el primer nivel presenta cuatro puertas que dan acceso a un único hipogeo; el segundo, sensiblemente menos desarrollado en altura, está decorado con una serie de medias columnas. Muy poco queda del tercer piso, originariamente construido en obra de albañilería.
Al norte del Teatro, el Siq exterior prosigue a lo largo del lecho del torrente de Moisés para luego doblar hacia la izquierda: esta es la zona donde se concentró la intervención urbanística romana. La calle de adoquines que había un tiempo atrás, había sido la arteria principal de la capital nabatea, y a lo largo de ella se levantaron edificios de utilidad pública, tales como un Ninfeo, varios Mercados y Termas, pórticos columnados y una Puerta Monumental.
Esta última, pese a no estar completa, es una de las construcciones que mejor se conservan , junto con dos templos nabateos erigidos probablemente entre el siglo I a.C y el I de la era cristiana.
Jerash o Gerasa es una de las ciudades romanas mejor conservadas de Oriente Próximo.
En esta guía visual te enseñamos la visita completa. wink
Al lado izquierdo de la calle está el templo nabateo conocido como Qasr el-Bint, “Palacio de la Hija del Faraón”. Aunque se lo defina como “Palacio”, es en realidad un templo consagrado a Dushara. Actualmente es el único edificio nabateo de Petra relativamente bien conservado que ha sido enteramente construido y no excavado en la roca.
Siguiendo nuestro camino llegamos a las escaleras de acceso al Monasterio. El Monasterio es junto con El Tesoro el monumento más icónico que ver en Petra. Pero para verlo hay que superar “unas pequeñas dificultades”.
Para llegar a el hay que subir 921 escalones. Más o menos 1 hora en subir y otra hora en bajar. Tener en cuenta el sol y las probablemente altas temperaturas (más de 30º un día normal).
Después de esto… nos fuimos a comer al restaurante que hay casi a los pies de la subida al monasterio. Descansamos un rato y sobre las 17:00 nos pusimos en marcha para desandar el camino que habíamos hecho durante la mañana. (Teníamos que estar en la taquillas de la entrada de Petra a las 19:00).
Así que mientras volvíamos, saboreábamos de nuevo las maravillas que ver en Petra que ya habíamos disfrutado anteriormente.
Son casi las 18:00 y comienza a atardecer. Si podéis os aconsejaría ver el Tesoro una vez más antes de iros, ya que el color de la fachada no tiene nada que ver por la tarde que cuando le da el sol directamente por la mañana. Tiene ese color rosado que todos tenemos en la cabeza cuando pensamos en la ciudad de Petra.
Por supuesto, ni que decir tiene que hay que hacer el Siq de vuelta… pero sinceramente, merece la pena.
Llegamos a la salida de Petra, y antes de irnos no podemos evitar fijarnos en cuánto puede ayudar una película para el turismo de un país… y de paso cómo seguir explotándolo muchos años después. wink
Terminado el día, toca ir al Hotel a hacer la maleta (ya que mañana dormimos en el Mar Muerto), y pensar en lo que veremos mañana, el impresionante desierto de Wadi Rum. surprised
Si quieres descubrir más sitios que visitar en Jordania, pásate por este post: “Que ver en Jordania – 15 Lugares que visitar“.
– Horarios para visitar Petra.
Los horarios de Petra varían durante el año.
Verano: 6:00 a 18:00.
Invierno: 6:00 a 16:00.
Durante el ramadán: 7:00 a 16:00.
* Información actualizada en: web de Turismo de Jordania.
– Precio de las entradas de Petra.
Hay dos formas para realizar la compra de entradas y visitar Petra:
1º- Entrada individual.
1 día: 50 JOD (aprox 62 €).
1 día*: 90 JOD (110€). *Este precio es en caso de que los viajeros que quieran la entrada de un día no hagan noche en el país, y tampoco lleguen por el puerto de Aqaba.
2 días: 55 JOD (68 €).
3 días: 60 JOD (74€).
La entrada es gratuita para menores de 12 años y personas con discapacidad.
* Información actualizada en: web de Turismo de Jordania.
2º- Entrada con el Jordan Pass.
La tarjeta turística Jordan Pass incluye la entrada de Petra + el coste del visado + la entrada a otros lugares que ver en Jordania.
El precio del Jordan Pass varía dependiendo de los días que vayas a visitar Petra:
1 día: 70 JOD (85€).
2 días: 75 JOD (92€).
3 días: 80 JOD (98€).
* Información actualizada en: web del Jordan Pass.
La diferencia de precio entre el Jordan Pass y la entrada normal es de 20 JOD (23€ aprox). Teniendo en cuenta que el visado para entrar a Jordania vale 40 €, merece la pena comprar el Jordan Pass aunque sea solamente para entrar en Petra.
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