Catedral de Plasencia.
Una visita por las alturas de la Catedral de Plasencia.
Con motivo del Travel Blog Meeting celebrado en la ciudad de Plasencia del 8 al 10 de Mayo de este año, tuve la oportunidad de poder disfrutar de una visita muy peculiar a la Catedral de Plasencia. Fue con una guía (Mercedes muchas gracias por todo) que nos hizo un recorrido muy especial y particular de esta magnifica construcción religiosa. Y es que además de contar con las interesantes explicaciones, tuvimos la oportunidad de realizar un itinerario que (por el momento no esta abierto al público pero se está intentado hacer) es realmente atractivo.
Siempre que hago un viaje me intereso por los edificios religiosos de la zona que visito, y me gusta por varios motivos: la arquitectura, pintura y escultura de estos recintos, suele contar con obras de auténticos genios. Lo que las hace “pequeños” museos dispersados por todas las partes de una ciudad, región o país.
En Plasencia su catedral o mejor dicho “concatedral”, es una visita muy recomendable para aquellos que compartan esta inquietud. wink
¿Qué es una “concatedral”? Yo aprendí éste término durante el Travel Blog Meeting, ya que con ésta palabra denominaba nuestra guía de la catedral.
Y es que resulta que este término es el resultado de tener dos catedrales solapadas. ¡Sí dos catedrales en una! Durante la Edad Media, fue muy frecuente a lo largo de toda la geografía española, sustituir las antiguas catedrales románicas, por edificios mas modernos y amplios. Ése es el caso de la Catedral de Plasencia, pero con la peculiaridad de que no se derribó por completo el antiguo edificio, si no que se fue construyendo por partes el nuevo, solapándose la moderna construcción a la anterior.
El plan inicial era derribar por completo la antigua y sustituirla por la nueva, pero la falta de medios económicos obligó a ir realizando la construcción poco a poco, sin que la catedral dejara de ser funcional.
Finalmente el proyecto de modernización quedó paralizado, dando como resultado, una sola catedral construida con dos estilos diferenciados, el románico y el plateresco.
Catedral Vieja:
Se inició la construcción de la antigua catedral en el siglo XIII, y no se acabaría hasta el siglo XV.
Destaca su claustro, en el se puede observar la transición de un estilo al siguiente, ya que tiene elementos de los dos, columnas y escenas de la biblia románicas y componentes góticos en los arcos.
Catedral Nueva (aquí se centró la mayor parte de la visita):
Se empieza a levantar en el año 1498 y se paralizó 80 años mas tarde (se volvió a retomar en el siglo XVIII pero no llegó nunca a acabarse).
La fachada principal se “terminó” en el 1558, y lo pongo entre comillas porque faltan las estatuas, que nunca se llegaron a esculpirse. A pesar de ello está ricamente ornamentada.
Sobresale la bóveda de crucería y el Retablo Mayor de estilo barroco, de 23 metros de altura.
El coro también merece una mención especial, la sillería (hecha con madera de nogal) estaba entes en la Catedral Vieja, en el centro está el sitio reservado a Obispo, y a izquierda y derecha los asientos destinados para los Reyes Católicos. Tiene abundantes detalles iconográficos y fue acabada en el 1505. La reja de cerramiento se acabó un siglo mas tarde y es de estilo plateresco.
El órgano de la catedral es una pieza que no podíamos dejar pasar por alto. De estilo plateresco y en un perfecto estado de conservación, bien merece hacer una parada y disfrutar de las decenas de figuras que lo decoran.
El recorrido especial empezó en el momento que entramos a la sacristía, y subimos las escaleras que daban acceso a un pequeño pasillo cuya entrada estaba detrás del altar mayor de la Catedral nueva, y nos permitía uno por uno, por un pequeño pasillo, ir andando por el lateral de la catedral hasta pasar por detrás del órgano.
Las vistas de la iglesia como podéis observar son espectaculares, dejando a las personas en un tamaño ridículo desde esa altura. Ademas tanto el altar como la nave central, desde este punto de vista, parecen todavía mas grandes que vistos desde el suelo.
Es de entender que esta visita no esté abierta al publico por la dificultad de movimiento por esta zona, ya que es un pasillo muy estrecho y que solo se puede ir en una dirección, además de ser imprescindible hacerlo acompañado, tanto por seguridad como por conservación del patrimonio. Y es que todo esta muy a mano, y ya sabemos que no todo el mundo cuida las cosas igual.
Una vez que realizamos esta primer toma de contacto con las alturas, subimos a la azotea de la catedral, para poder disfrutar de varias cosas:
Unas vistas privilegiadas de la ciudad de Plasencia, disfrutar de la decoración del tejado y poder ver a las verdaderas dueñas de la catedral (las cigüeñas y sus crías) mas cerca que nunca.
Las vistas como podéis ver son espectaculares. Desde la ciudad de Plasencia, a la misma plaza de la Catedral.
Pero no os voy a descubrir nada nuevo a aquellos que os guste disfrutar de las ciudades vistas desde las alturas. wink
Las cigüeñas como podéis comprobar tienen “tomado” el techo de la Catedral.
Hay nidos por todos sitios y ellas vuelan sobre nuestras cabezas a sus anchas. Este es uno de los principales problemas para poder hacer la visita abierta al público. Tanto desde el arzobispado como desde la oficina de turismo de Plasencia, tienen muy en cuenta la época de cría de estas aves, lo que dejaría en muy pocos meses las fechas visitables de la azotea sin molestar a las aves.
Otro problema que ocasionan estos animales es el enorme peso de sus nidos (pueden llegar a los 600 kilos), que ponen en peligro la construcción religiosa, y hacen que se destinen enormes cantidades de dinero para minimizar estos daños. Y por último es la cantidad y el daño de sus excrementos… Ya podían tener un poquito mas de cuidado las cigüeñas… bigsmile
Tomamos el camino de vuelta a la salida, pero antes haremos una visita más. Andaremos por encima de la bóveda y veremos que el grosor del techo es mucho menor del que a primera vista parece cuando la tienes sobre tu cabeza. surprised
Por estos agujeros que están en el techo, pudimos comprobar como la bóveda de crucería es ligerísima.
Y ya con esto terminamos nuestra visita. Con muy buen sabor de boca tanto por lo que hemos visto, como por la suerte que hemos tenido de poder acceder a estos sitios (de momento) apartados al público, pero que espero que en poco tiempo se puedan visitar, ya que desde luego le dan un “plus” a una catedral que de por si es muy bonita, pero que así se convierte en increíble. wink
Información práctica Catedral de Plasencia:
Horario de apertura:
-En verano:
De martes a domingo abierto de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00.
-En invierno:
De martes a domingo de 11:00 a 14:00 y de 16:00 a 19:00.
Precio de entrada 4€ por persona.
Más información de Plasencia en la página web:
http://www.plasencia.es/web/turismo-plasencia
Oficina Municipal de Turismo: C/ Santa Clara, 4
tel: 927 423 843
